Consejos Para Calmar La Mente
Todos nos preocupamos y nos molestamos de vez en cuando. Es una parte normal de la vida. Pero, ¿qué sucede cuando esa ansiedad o enojo se apodera y no puedes calmarte?
A veces, poderte calmar en ese momento no resulta nada fácil.
Tener algunas estrategias con las que estés familiarizado puede ayudarte cuando te sientas ansioso o enojado.
Por eso hoy quiero compartir contigo algunos consejos útiles que puedes poner en práctica la próxima vez que necesites calmarte.
Respira
La respiración es la técnica número uno y más efectiva para reducir la ira y la ansiedad rápidamente.
Cuando estás ansioso o enojado, tiendes a tomar respiraciones rápidas y superficiales. En consecuencia, se envía un mensaje a tu cerebro, causando un ciclo de retroalimentación positiva que refuerza su respuesta de lucha o huida. Es por eso que tomar respiraciones largas y relajantes interrumpe ese ciclo y te ayuda a calmarte.
Existen varias técnicas de respiración que te pueden ayudar a calmarte. Una de ellas consiste en inhalar profundamente y luego exhalar por completo mientras prestas atención a tu cuerpo.
Una vez que te sientas cómodo con esa respiración, puedes cambiar la proporción de inhalación y exhalación a 1: 2 (ralentizas tu exhalación para que sea el doble de tiempo que tu inhalación).
Practica estas técnicas mientras está tranquilo para que sepas cómo hacerlo cuando estés ansioso.
Admite que está ansioso o enojado
Permítete decir que estás ansioso o enojado. Cuando admites cómo te sientes y te permites expresarlo, la ansiedad y la ira que estás experimentando pueden disminuir.
Desafía tus pensamientos
Parte de estar ansioso o enojado es tener pensamientos irracionales que no necesariamente tienen sentido. Estos pensamientos son a menudo el "peor de los casos". Puede que te encuentres atrapado en el ciclo "qué pasaría si", lo que puede hacer que sabotees muchas cosas en tu vida.
Cuando experimentes uno de estos pensamientos, detente y hazte las siguientes preguntas:
¿Es probable que esto suceda?
¿Es este un pensamiento racional?
¿Alguna vez me ha pasado esto?
¿Qué es lo peor que puede pasar? ¿Puedo manejarlo?
Tras analizar las preguntas, es hora de replantear tu pensamiento. En lugar de pensar de la siguiente manera "No puedo cruzar ese puente porque podría haber un terremoto y caería al río", piensa de esta manera: "Hay personas que cruzan ese puente todos los días, y nunca se han caído al agua".
Libera la ansiedad o la ira
Una buena manera de liberar la energía emocional es haciendo ejercicio. Al realizar ejercicio físico se libera serotonina que te ayudará a calmarte y a sentirte mejor.
Sin embargo, debes evitar la actividad física que incluya la expresión de enojo, como golpear o gritar.
Se ha demostrado que esto aumenta los sentimientos de ira, ya que refuerza las emociones porque terminas sintiéndote bien como resultado de estar enojado.
Visualízate tranquilo
Este consejo requiere que practiques las técnicas de respiración que has aprendido. Después de tomar algunas respiraciones profundas, cierra los ojos e imagínate tranquilo. Observa tu cuerpo relajado e imagínate trabajando a través de una situación estresante o ansiosa manteniéndote calmado y concentrado.
Al crear una imagen mental de cómo mantener la calma, te será más fácil regresar a esa imagen cuando estés ansioso.
Relaja tu cuerpo
Cuando estás ansioso o enojado, puedes sentir que todos los músculos de tu cuerpo están tensos (y probablemente lo estén). Practicar la relajación muscular progresiva puede ayudarte a calmarte y a centrarte.
Para hacer esto, túmbate en el suelo, sobre la espalda, con los brazos extendidos a tu lado con las palmas hacia arriba.
Empieza relajando los dedos de tu pies y lentamente sube relajando parte a parte hasta llegar a la cabeza.
También tienes la opción de usar la relajación guiada en Savasana, que puedes encontrar dentro del programa de Neyu Yoga.
Escucha música
La próxima vez que sientas que aumenta tu nivel de ansiedad, sintoniza tu música favorita. Escuchar música puede tener un efecto muy relajante en tu cuerpo y mente.
Toma aire fresco
La temperatura y la circulación del aire en una habitación pueden aumentar tu ansiedad o enojo. Si te sientes tenso y el espacio en el que estás está caliente y cargado, esto podría desencadenar un ataque de pánico.
Retírate de ese entorno lo antes posible y sal a la calle, aunque solo sea por unos minutos.
No solo el aire fresco ayudará a calmarte, sino que el cambio de escenario a veces puede interrumpir tu proceso de pensamiento ansioso o enojado.
Ajusta tu postura corporal
Si tu cuerpo está tenso, existe una buena posibilidad de que tu postura sufra. Siéntate, con la espalda alargada, respira hondo y relaja los hombros. Concéntrate en juntar los omóplatos entre sí hacia abajo, manteniendo una respiración profunda y relajada.
Escribe
Si estás demasiado enojado o ansioso por hablar sobre el tema, escribe tus pensamientos en un diario. No te preocupes por escribir de forma correcta, con oraciones completas... solo escribe.
Escribir te ayudará a sacar pensamientos negativos de tu cabeza.
Puedes ir un paso más allá y hacer un plan de acción para seguir manteniendo la calma una vez que hayas terminado de escribir.
Identifica los puntos de presión para calmar la ira y la ansiedad
Ir a un masaje u obtener acupuntura es una forma maravillosa de controlar la ansiedad y la ira. Pero no siempre es fácil encontrar tiempo en su día para que esto suceda. La buena noticia es que puedes hacerte acupresión para aliviar la ansiedad al instante.
Este método implica presionar con los dedos o la mano en ciertos puntos del cuerpo. La presión libera la tensión y relaja tu cuerpo.
Un área para comenzar es el punto donde el interior de la muñeca forma un pliegue con la mano. Presiona tu pulgar sobre esta área durante dos minutos. Esto puede ayudar a aliviar la tensión.
Piénsalo bien
Ten un mantra para usar en situaciones críticas. Solo asegúrate de que sea útil.
Si no sabes ningún mantra puedes usar algunos de los siguientes: "Esto también pasará", "Todo está bien", "Controlando mi respiración, controlo mi paz interior"...
Cuando estamos ansiosos o enojados, nos enfocamos en la causa y los pensamientos racionales abandonan nuestra mente. Estos mantras nos dan la oportunidad de permitir que el pensamiento racional regrese y conducir a un mejor resultado.
